Buscando Asilo

Season 6, Episode 6

Este episodio es sobre los solicitantes de asilo en la ciudad de Nueva York. Estamos compartiendo estas narrativas personales con la esperanza de que escucharlas devuelva la humanidad a esta crisis. 

Más recursos:

Este es nuesta lista de libros sobre los migrantes y solicitantes de asilo.


Episode Transcript

Transcripción en Español

Virginia Marshall Hola, oyentes de Borrowed. Quería volver a presentar a Heyrling, mi copresentadora del último episodio y bibliotecaria de la Biblioteca Central.  

Heyrling Oropeza Hola.   

Virginia Marshall Y una copresentadora nueva … Damaris Olivo.  

Damaris Olivo Hola, soy la directora de comunicaciones de BPL. Esta es la segunda parte de nuestro episodio de dos partes sobre los solicitantes de asilo en la ciudad de Nueva York. Y este episodio pase un poco diferente. De hecho, es nuestro primer episodio en español. 

Heyrling Oropeza Si quieres escuchar en inglés, tenemos otro episodio con narración en inglés. 

Damaris Olivo If you don’t speak Spanish, you can listen to the episode in English on our website. Hay unas entrevistas en este episodio se realizaron en inglés. Si no habla el idioma, puede leer con la transcripción en español en nuestro sitio web. Desde que grabamos este episodio, el panorama ha cambiado. El Título 42, la regla federal de la era de la pandemia que permitía rechazar a los inmigrantes en la frontera, termino la semana pasada. La Gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul declaró un estado de emergencia ya que la ciudad de Nueva York espera que lleguen hasta 1000 migrantes y solicitantes de asilo cada día. El alcalde Adams ha suspendido la ley de "derecho al albergue” de la Ciudad que garantiza a todos los neoyorquinos sin hogar un lugar para dormir y se esfuerza por mantener unidas a las familias que llegan. Estamos compartiendo estas narrativas personales con la esperanza de que escucharlas devuelva la humanidad a esta crisis. 

Virginia Marshall Y ahora pasaremos al episodio. Soy Virginia Marshall.  

Damaris Olivo Soy Damaris Olivo. 

Heyrling Oropeza Y yo soy Heryling Oropeza. Están escuchando Borrowed: cuentos que empiezan en la biblioteca. 

[Música]

Heyrling Oropeza En una tarde gris al principio de Abril, Virginia y yo estuvimos en la esquina de la Cuarta Avenida y Bay Ridge Parkway aquí en Brooklyn. Estuvimos allí para encontrarnos con Cynthia.  

Cinthya Briones [En Inglés] Sí, soy Cynthia Santos Briones. Estamos en la Iglesia Luterana del Buen Pastor en Bay Ridge. Soy artista y también organizadora comunitaria, y he estado trabajando como miembro del Movimiento del Nuevo Siglo. Pero también una parte de mi familia era indocumentada hace mucho tiempo.  

Damaris Olivo Cynthia es una de las primeras embajadoras del patrimonio de Biblioteca Pública de Brooklyn, un nuevo programa bibliotecario que apoya a los practicantes de las artes populares de Brooklyn y proporciona un espacio en la biblioteca donde pueden compartir sus conocimientos.  

Heyrling Oropeza Cynthia organizó un programa sobre plantas tradicionales y creación de arte para la biblioteca, y reunió a miembros de la comunidad de Bay Ridge.  

Cynthia Briones [En Inglés] Siempre pienso en cómo conectar a las personas que no tienen los recursos o que no los tienen, o que no saben cómo acercarse a una biblioteca porque no hablan inglés. Sabes, mi función podría ser servir de puente para llevar a esas personas a las bibliotecas.  

Heyrling Oropeza Decidimos reunirnos con Cynthia en Lutheran Church of the Good Shepherd en lugar de en la biblioteca debido al trabajo que la iglesia ha estado realizando para apoyar a las personas que buscan asilo. Y Cynthia tiene una conexión profunda con Good Shepherd.  

Cinthya Briones [En Inglés] Mi esposo, Juan Carlos, comenzó a trabajar como pastor principal de esta iglesia en 2018. Y yo diría que, quizás desde ese período de tiempo, la iglesia comenzó a trabajar en torno al tema de la migración en diferentes niveles. No cruzó la frontera, pero era indocumentado y toda su familia. Así que cuando estas y las leyes y políticas de inmigración te afectan, tocan tu cuerpo, tu mente, tu ciclo emocional, en algún momento tienes que trabajar en ello. Ya sabes, tienes que participar.  

Heyrling Oropeza Nos reunimos con Cynthia frente a la iglesia un jueves, lo que significaba que ofrecían servicios legales internos a los solicitantes de asilo. Además, hay muchos programas y servicios que se ofrecen en Good Shepherd, distribución de comida y ropa, clases de arte y música, clases de inglés y mucho más.  

Cinthya Briones [En Inglés] La gente te da la pista de adónde tienes que ir, ya sabes, como institución. Es como si necesitáramos comida, necesitáramos apoyo legal, necesitáramos asesoramiento sobre la violencia doméstica.  

Lily Desde hace tres años empezamos a repartir despensas, comida. Ha sido vegetales, carne fría a veces.  

Damaris Olivo Esta es Lily, una voluntaria de Good Shepherd. Ha estado a cargo de la distribución de alimentos en la iglesia desde que comenzó la pandemia. La iglesia atiende entre 50 y 200 personas todos los días, a veces con tacos y burritos donados por el restaurante mexicano Tacombi, y el resto del tiempo, con comida preparada en las cocinas de la iglesia con verduras y carnes donadas. Lily, como todos los que trabajan en la cocina, es voluntaria.  

Lily Ahorita también están viniendo muchos migrantes que todos los días vienen aquí a comer, entonces se cocina aquí, conviven un poco con la comunidad todos los días. Entonces um, ayudamos un poco. Somos voluntarios, todos somos voluntarios. Entonces me han puesto como al frente de repartir la comida en la despensa y he sido encargada de eso por y no han sido los tres años.  

Damaris Olivo La mayoría de los voluntarios son migrantes recién llegados que ayudan mientras esperan establecerse en los Estados Unidos. También hay miembros de la comunidad de Bay Ridge que llevan mucho tiempo allí y que tienen más recursos y tiempo libre. En la iglesia hay un verdadero espíritu de ayuda mutua, donde las personas dan y reciben en igual medida y trabajan juntas como una comunidad para sostenerse unos a otros. Nos despedimos de Lily y seguimos a Cynthia hasta la entrada de la iglesia. Tres adorables niños pequeños nos miraron riendo.  

Cinthya Briones ¿Primas? ¿Y dónde son?   

Heyrling Oropeza Cynthia se agachó para hablar con ellos. "¿Son hermanos?" preguntó ella. Dijeron que somos primos. Cynthia siguió hablando con ellos mientras levantaba su teléfono para tomar una foto.  

Cinthya Briones ¿Sí? ¿Puedo tomar una foto?

Damaris Olivo Las fotografías de Cynthia han aparecido en todas partes, desde el New York Times hasta el cementerio de Green-Wood. Ha documentado a las personas que viven en espacios santuarios a través de fotografías, historias orales y otros proyectos de arte. Pondremos un enlace a su sitio web en nuestra página de episodios para que puedan ver su trabajo.  

Heyrling Oropeza Dentro de la iglesia había entre 150 y 200 personas. Los niños jugaban con juguetes mientras sus padres estaban sentados en las mesas con un aspecto bastante cansado. De vez en cuando, un voluntario venía con una bandeja de galletas de mantequilla de maní, o mantequilla de cacahuate, sándwiches, galletas o un trozo de pan con queso crema y un tomate cherry por encima.  

Damaris Olivo La mayoría de las familias acudieron a la clínica legal. Pero mientras esperaban, tuvimos la rara oportunidad de descansar y comer algo, hablar con amigos y simplemente estar en un lugar seguro y acogedor durante unas horas.  

Juan Carlos Ruiz Y no es cámaras. Es audio.

Damaris Olivo Ese el pastor Juan Carlos Ruiz, el esposo de Cynthia y el líder de esta comunidad. Nos presentó en español y dijo que si alguien quería hablar con nosotros, podía hacerlo libremente.  

Heyrling Oropeza Hola, buenas tardes. Bien, ¿platicar con nosotros?

Virginia Marshall Oh, muchas gracias.  

Heyrling Oropeza No pasó mucho tiempo antes de que una mujer nos hiciera una seña para que nos acercáramos y nos sentáramos en su mesa.    

Valentina Pero usted que desea saber lo que. ¿Cómo fue mi travesía para venir acá hasta los Estados Unidos? 

Heyrling Oropeza Valentina es una mujer pequeña con un cuidadoso delineado de ojos y pelo negro corto. Se sentó junto a sus dos hijos, María, una niña de edad escolar, y Eduardo, un adolescente. Hablamos con Valentina, junto a sus hijos y su amiga Gabriela, quien también se encontraba sentada en la mesa con sus propios hijos por cerca de una hora. 

Damaris Olivo Y compartieron sus historias sobre cómo migraron desde Sudamerica a pie, en trenes y autobuses hasta la frontera entre México y Estados Unidos. Ambas mujeres fueron cálidas y amables, y decidieron compartir sus historias con nosotros para que los oyentes pudieran entender lo que han sufrido para llegar hasta aquí.  

Heyrling Oropeza Les aviso de que estas historias serán difíciles de escuchar. Valentina, Gabriela y sus hijos sufrieron abusos, privaciones y muchas otras dificultades para llegar hasta aquí. Y ahora están intentando ganarse la vida en los Estados Unidos. La primera es Valentina. 

Valentina Me pasé por muchas situaciones tristes, como muchos pasan para venir. Entonces yo salí de Ecuador, pasé por la selva donde vi muchas personas muertas, mucha gente que sufría, mucha gente que ya no avanzaba a caminar. Pero lo más doloroso es que usted quiere ayudar y ayuda, pero como usted tiene que seguir, tiene que dejarles atrás …. tengo un niño que es especial. El tiene autismo, pero cuando yo vine, él tenía mala rodilla, entonces él no podía caminar. Unos días antes nosotros teníamos que cargar en la espalda para irnos a cualquier lado así. Entonces a mí me decían que no le lleve a él, que le deje, pero yo no tenía con quién dejarle. Entonces le vine trayendo. 

Heyrling Oropeza Valentina habló cómo dejó su país de origen y caminó por la selva durante días, pasando por personas muertas y moribundas. Su hijo, Eduardo, tiene autismo. Él estaba sentado al lado de Valentina en la mesa armando un avión de Lego. Se acercó a hablar. 

Eduardo Yo vine acá por, por mi mamá y por mí y por mi hermana. Porque acá íbamos a hacer una nueva vida …. hemos pasado por mucho, pasamos por la selva que fue bien feo y había muchos muertos y habido un muerto y ahí también gritaban, pasamos por piedras, nos picaban, gritaron, nos pasaron, me quemé el cuerpo, me queme los brazos. … Del tren pasamos bien feo porque ahí teníamos que subirnos al vuelo. Iba bien rápido y después pasamos solo tres trenes y tres días pasamos en el tren. En el primer tren fue como un vagón abierto lo de arriba, despues en el filo del tren. Hacía full frío, mi hermana se moría de frío y yo a mi mamá y yo sólo teníamos una sábana para acobijarnos y eso no calentaba nada.  

Damaris Olivo Eduardo describió haber subido al “tren de la muerte” o “la Bestia,” unos nombres que muchos migrantes llaman a una red de trenes que cruzan México. Eduardo dijo que él y su familia se esforzaron por permanecer tres días en el tren. Luego, Gabriela contó su historia.  

Gabriela Así como dice la compañera, nosotros somos de una familia bastante, bastante pobre. Nuestro país es un país hermoso, también nuestro país. Lo que pasa es que mas antes había como un poquito más de posibilidades, pero ahorita con la presidente, con el presidente que estamos, yo lo veo que estamos perdiendo a nuestro país porque ya entró también la mafia y hay mucha, mucha, mucha corrupción, ya no podría, no podemos estar como antes … cruzamos igual la selva y fue muy feo. Yo me demoré cuatro días, cuatro días en la selva. Nuestro mejor mejor compañía fue Dios, fue Jesús. Él estuvo con nosotros cada momento, pero hubo momentos que en verdad nos daba mucho miedo. Yo pensaba que a ellas les iban a violar, que a mis hijas les iban a violar porque estábamos dentro de un bosque. Imagínese, ellos armados y nosotros sin nada …  

Damaris Olivo Mar´Ia quiere hablar. Apoyándose en su madre, Valentina, ella describió que dormía en las calles de una ciudad en México y vio las cucarachas que entraban en las cajas de cartón en las cuales dormían. 

María Dormimos ahí como diez, 20 días, todas las cucarachas que me daba miedo porque son muy feas, con las arañas, con todo eso. Y un día nos acostamos donde dormíamos en cartones y un día nos acostamos donde osea hacían pipí y ahí nos habíamos acostado pero no nos habíamos acordado. 

Heyrling Oropeza La familia finalmente llegó a la frontera y cruzó a los Estados Unidos. Eduardo habló sobre los centros de detención donde él y su familia estuvieron recluidos y luego se separaron.  

Eduardo La primera cárcel no nos separaron, era bien feo, no se notaba ni la hora, no decían la hora ni el día, no se, no se notaba que ahora era de noche, si era de día. Nos dieron solo una, una cama. Era como una colchoneta. Nos dieron como una cobija, así de plástico. No era de plástico, era de bueno, no nos dieron, pero no nos calentó eso porque ahí hacía frío. Ahí era una prisión donde mi mamá y mi hermana, me separaron de ella. Le pusieron en un cuarto muy alejado de mi mamá. 

Damaris Olivo Finalmente, las dos familias llegaron a Nueva York. Aquí está Valentina otra vez.  

Valentina Que en Nueva York te van a ayudar, vas a ir a un albergue y yo mándeme donde sea, pues yo no tengo donde llegar, pues mándeme donde sea. Y Dios me trajo aquí y es una bendición y un testimonio para contar. Yo no tengo más familia, mamás, papás, no se tiene, es solo somos nosotros, porque cuando yo más necesité a mí nadie me ayudó cuando pedía dinero, que me ayuden para salir y no dormir en la calle, porque dormí mucho tiempo en la calle hasta llegar acá. Dios me dio la oportunidad de estar aquí. Pero también espero que Dios me ponga muchas personas de bendición para poder que nuestro sueño se haga realidad más el mío.Solo quiero trabajar y pagar. No quiero una casa para que una casa, un terreno, algo material. Cuando yo me muera no voy llevando la casa en un ataúd, no solo quiero que ellos se acuerden de mí, que yo hice lo humanamente posible y saque adelante a mis hijos por decir a mí me regalan esto para mí, Dios le pague, yo no exijo. Y si recojo así ropita es para mandar a mis hijos, porque nosotros vivimos de una pobreza muy grande. Entonces por eso si yo quiero que Dios me bendiga y cuando ya este un poquito bien me ponga un escritor para poderle contar mi historia y para que mi historia sea leída y así sea la reflexión de muchas mujeres y de muchas personas y de jóvenes también, porque yo he vivido lo que es en mi país … un sueño del hijo de la señora y un sueño de mi hijo, aunque tiene su discapacidad. Pero será posible que sí puedan ser? Pertenecer a Estados Unidos y ser militares. Es el sueño que él viene también a hacer. 

Damaris Olivo Tanto los hijos de Valentina como los de Gabriela sueñan con estar en el ejército estadounidense. En cuanto a Valentina y Gabriela, solo quieren poder trabajar y mejorar la vida de sus hijos.  

Heyrling Oropeza Después de dar las gracias a Valentina, Gabriela, Maria, y Eduardo por sus historias, llegó el momento de empezar la clínica legal. El pastor Juan Carlos pidió a los niños que recogieran los juguetes e hizo que todos se reorganizaran para dejar espacio para los voluntarios. Juan Carlos es el tipo de persona que está en constante movimiento, y siempre respondiendo preguntas y tomando decisiones. Es uno de los cofundadores del Nuevo Movimiento Santuario, una red de organizaciones religiosas que se unieron en el 2006 para defender a las familias inmigrantes de ser separadas por la deportación y abogar por la reforma migratoria. A pesar de las muchas demandas de su tiempo, el pastor Juan Carlos encontró un momento para hablar con nosotros. Dijo que el grupo que vimos en el santuario ese día en realidad era más pequeño que el promedio para un jueves por la noche. En un momento, la Iglesia proporcionó refugio a hasta 40 familias al mismo tiempo. 

Juan Carlos Ruiz [En Inglés] Hay que recordar que hemos pasado por pandemias globales. Durante aproximadamente un año y medio, ayudamos a unas 3000 familias por semana con paquetes de alimentos. Así que estamos hablando de, ya sabes, bolsas de unas 50 libras con verduras, cereales, solo lo de primera necesidad. En un momento dado, durante más de un año y medio, teníamos entre 50 y 100 voluntarios trabajando, ya sabes, de 8 a 12 horas al día. Así que aún no hemos cerrado ni un día.  

Virginia Marshall [En Inglés] Solo iba a preguntarte, ya sabes, ¿cómo pueden usted y supongo que su comunidad, cómo hacen que siga adelante, como seguir ayudándose unos a otros?  

Juan Carlos Ruiz [En Inglés] Ya sabes, COVID nos enseñó que estos cuidados personales en realidad no funcionan. Tiene que ser más atención comunitaria, ya sabes, porque en ese momento, no sé si lo recuerdas, pero los hospitales estaban colapsando y cualquier tipo de atención médica tradicional estaba fallando. Así que tuvimos que cambiar el modo. Así que empezamos a recibir terapias como baños de sonido. Hicimos acupuntura. Aún tenemos acupuntura. Así que empezamos a pensar de forma innovadora y a hacer cosas que nos mantuvieran, ya sabes, humanos y en contacto y conectados con la comunidad en general y con nuestras propias familias y amigos.  

Virginia Marshall [En Inglés] ¿Qué es lo que le gustaría que supieran los oyentes y cómo pueden ayudar? Porque parece que hay muchas maneras, pero me encantaría saber de ti.  

Juan Carlos Ruiz [En Inglés] Trabajamos con esa sensación de que, ya sabes, si quieres venir a ayudarnos, quédate en casa entonces. Pero si quieres venir y ayudarnos como una forma de colaborar con nosotros, como una forma de saber que quien venga ahora mismo, ya sabes, se trata de su liberación y quiere unirse a nosotros en esa lucha, en ese frente, eres más que bienvenido a unirte a nosotros. Porque muchas de las personas a las que servimos y con las que trabajamos, a las que acompañamos, básicamente buscan justicia. Por lo tanto, no pedimos a la gente que participe en obras de caridad. Así que es algo mucho más profundo y humano.  

Damaris Olivo Sabes, están sucediendo tantas cosas en Good Shepherd que es fácil olvidar que sigue siendo una iglesia.  

Heyrling Oropeza Sí, es muy cierto. Y resulta que estuvimos de visita no en cualquier jueves, sino el Jueves Santo. Y además de eso, el pastor Juan Carlos iba a oficiar una boda durante el servicio.  

Juan Carlos Ruiz [En Inglés] Y es una forma de infringir la ley al servicio de la humanidad, de las personas. Muchas personas no están, ya sabes, casadas y, a veces, sus casos ... Al estar separado, corre más riesgo porque existe una ley a nivel nacional que en cierto modo protege la unidad familiar. Básicamente le estamos diciendo a la gente que si no estás casado y vives con tu cónyuge, oye, esta es tu oportunidad. Quiero decir, y esta es una forma muy concreta de cuidar a tu pareja, ya sabes, casarte.  

Heyrling Oropeza Antes de volver al santuario, el pastor Juan Carlos nos condujo por un pasillo para encontrarnos con más voluntarios.   

Juan Carlos Ruis [En Inglés] Hay otra cocina.  

Virginia Marshall [En Inglés] Vale. Muy bien.   

Juan Carlos Ruis [En Inglés] Aquí es donde sucede todo lo demás.  

Virginia Marshall [En Inglés] Huele bien

Heyrling Oropeza En la cocina. Eran casi una docena de voluntarios trabajando, preparando pollo, picando verduras y, lo que es más impresionante, decorando un intrincado pastel con rosas auténticas bañadas en escarchas.  

Heyrling Oropeza ¿Puede decir lo que es?  

Cocinero Ah, es un dulce de frambuesa con crema pastelera.  

Heyrling Oropeza Ah. Se ve delicioso.

Virginia Marshall [En Inglés]  Para la boda.  

Heyrling Oropeza El pastel se llama milhojas y estaba tan deliciosa como se veia, pudimos probar un poco ... Capas de masa fina con relleno de crema dulce. El hombre que hizo el postre era un pastelero de Colombia. Y conocimos a algunos de los otros voluntarios, incluyendo a una mujer llamada Jerlay, que estaba embarazada.  

Virginia Marshall ¿Jerlay? Encantada.  

Jerlay Y Mia. Mia.  

Heyrling Oropeza "Mía", dijo señalando su barriga. Jerlay estaba allí con su pareja, Francisco, quien nos preguntó si conocíamos de cursos donde pudiera obtener una licencia para conducir un camión, porque así es como se ganaba la vida en Colombia.  

Fancisco ¿Tienes cursos? ¿Varios cursos?  

Damaris Olivo Francisco y Jerylay ayudaban a cocinar. Se habían ofrecido como voluntarios todos los días, cocinando varias comidas al día mientras esperaban para instalarse en Brooklyn.  

Jerlay Sí, nosotros cocinamos. Yo cocino. Cocino arroz chino, comida colombiana, sancochos, cocinamos todos. Comidas rápidas... Todos los días para 500 para 400, para 150 personas, para 50. Yo cocino.  

Heyrling Oropeza Wow. ¿Y le gusta cocinar?  

Jerlay Sí, si me gusta cocinar.  

Heyrling Oropeza ¿Y tiene un sueño? ¿Por ejemplo en el futuro? ¿Qué tipo de restaurante?  

Jerlay Comida típica colombiana.  

Heyrling Oropeza Su sueño es abrir un restaurante con comida tradicional colombiana. Pero tiene que esperar, dice, volviendo a señalar su barriga... Para el bebé.  

Jerlay Desqués. Quizá más tarde. Sí. Sí.  

[Music] 

Damaris Olivo Borrowed es presentado por la Biblioteca Pública de Brooklyn. Este episodio fue escrito y por Heyrling y Virginia y hoy es presentado por Heyrling y yo. Nuestro equipo está formado por Adwoa Adusei, Fritzi Bodenheimer, Robin Lester Kenton, Ali Post, y Jennifer Proffitt y Ashley Gill se ocupan de nuestras redes sociales. Nuestro compositor musical es Billy Libby. Meryl Friedman diseñó nuestro logotipo.  

Heyrling Oropeza También queremos dar las gracias a todos los miembros de Lutheran Church of the Good Shepherd, en especial a Cynthia Briones y al pastor Juan Carlos Ruiz. Si quieres leer este episodio en inglés o español, visita el podcast Brooklyn Library [punto] org [barra] podcast. También puedes traducir nuestro sitio web a 21 idiomas differentes.  

Damaris Olivo En BPL, continuaremos apoyando a todas las personas sin hogar y aquellos que buscan refugio. Nuestro bibliobús y personel de apoyo ha estado visitando refugios, hoteles y centros de ayuda humanitaria en Brooklyn para servir a migrantes y solicitantes de asilo. Hacemos inscripciones para obtener tarjetas de biblioteca, brindamos acceso a libros y les conectamos con servicios de organizaciones asociadas.   Muchas de estas iniciativas son financiadas por la ciudad, por lo que les pedimos a nuestros oyentes que defiendan las bibliotecas y protejan nuestros fondos. Puede enviar una carta a los líderes de su ciudad o hacer una donación a BPL. Visite nuestra pagina de web para aprender cómo hacerlo.

Si está buscando ayuda legal con su caso de inmigración, puede llamar a la Oficina de Asuntos de Inmigrantes de la ciudad al 212-788-7654. Catholic Charities también brinda servicios y ayuda legal a los solicitantes de asilo. Su número es (888) 744-7900. A medida que evoluciona la crisis migratoria, puede haber cambios en los legales en cuanto a los solicitantes de asilo. La ciudad ha creado una serie de videos en español sobre cómo navegar esos procesos. Pondremos un enlace a esos videos en nuestro sitio web. Si quiere ayudar, únase o apoye a las organizaciones locales en su comunidad. Puede ser voluntario en su biblioteca local, especialmente si habla más de un idioma. Visite nuestra pagina de web para obtener más información. 

Si vive en la ciudad de Nueva York, hay grupos de ayuda mutua en casi todos los vecindarios a los que se puede unir. Si ya es parte de una organización religiosa o comunitaria que quiere ayudar a los migrantes y solicitantes de asilo, puede registrarse en la Oficina de Asociaciones Comunitarias y Religiosas de la ciudad para que puedan conectar más fácilmente a las personas con la ayuda que necesitan. Pondremos enlaces a ese sitio web, y una lista de grupos de ayuda mutua en la ciudad de Nueva York, en nuestra página web de episodios. 

Heyrling Oropeza Gracias por escuchar. Volveremos a sus oídos en unas pocas semanas.